miércoles, 17 de febrero de 2010

Nosotros también sufrimos



Aunque ustedes no lo crean,
o me acusen de machista
por defender el derecho de los hombres
a sufrir.

Dirán algunas
¿Cómo no pobrecitos?

Pero también tenemos derechos
a comprarnos una yerbera y ponerla encima del escritorio
a plantar flores en diciembre y no en abril

Sufrimos
porque tienen sexo desde su escritorio
por Internet,
 con un tipo que se encuentra
al otro lado del mundo y que les escribe

-          Tócate el centro de tu cuerpo
que no importa que yo viva en Bohemia
Me tocaré el mío –

Sufrimos de que a las once de la mañana
Ustedes estén acostadas virtualmente con un Checoslovako
que se toca efusivamente frente a un computador.

Sufrimos por unas cosas tan  simples
como el carrito de hierro que nunca tuvimos,
por la chica que a los quince años nos dijo que no,
por el amor que nunca vamos alcanzar.

No hemos entendido
que somos pequeños seres terrestres,
atrapados en la angustia existencial
De querer ser  únicos
en una época que el amor es de muchos.

Pablo Moraga


4 comentarios:

Ambrosía ignota dijo...

En la sociedad capitalista contemporánea, el significado del término igualdad se ha transformado. Por "él" se entiende igualdad de los autómatas, de hombres aunque ha perdido su individualidad. Hoy en día, igual significa "identidad" antes que "unidad". Es la identidad de las abstracciones, de los hombres que trabajan en los mismos empleos, que tienen idénticas diversiones, que leen los mismos periódicos, que tienen idénticos pensamientos e ideas. En este sentido, también deben recibirse con cierto escepticismo algunas conquistas generalmente celebradas como signos de progreso, tales como la igualdad de las mujeres,

Los aspectos positivos de esa tendencia a la igualdad no deben engañarnos. Forman parte del movimiento a la eliminación de las diferencias. Tal es el precio que se paga por la igualdad: Las mujeres son iguales porque ya no son diferentes. La proposición de la filosofía del iluminismo, el alma no tiene sexo, esta desapareciendo, y con ella el amor erótico, que se basa en dicha polaridad. Hombres y mujeres son idénticos, no iguales como polos opuestos.

El texto anterior es un fragmento del libro "El arte de amar" de Erich Fromn y lo recordé y lo consideré preciso después de leerlo.

posdata,
Es extraño y necesario su texto en la actualidad porque hay temas que no se tocan, ya que aun se manejan como absolutos. Esas línea débiles y fronterizas que separa los sentimientos y gustos de un hombre y una mujer considero deben de desaparecer en igual no en polaridad; Y me refiero a expresarse, independiente al sexo o género, deberíamos ahondar más en ello. Que bueno que toco el tema, que se presta a muchas discusiones. Entre ello, es también lo necesario. ¿cierto?

Los seres humanos aun nos mofamos de nuestra imperfección, porque sabemos que jamas seremos perfectos.

finalizo con sus palabras para invitar al dialogo "solo la interacción hace que lo humano no muera."

Alejso

Sergio Morataya dijo...

Escribí esto por la razón de que hay que defender a los pobres hombres machistas que están sufriendo que sus mujeres tienen cyber novios y cyber sexo. Y no hayan por donde sacar su cólera. Saludos.

Ambrosía ignota dijo...

También mi comentario, aunque amplio lo concerté basado en sus letras, porque tenía que ver con diversiones y preocupaciones de la actualidad, de igualdad y polaridad. y de esas aserciones que sin duda alguna a usted lo ocupan en esta ocasión ó al menos en el texto.

saludos!

Juan José Lori dijo...

Esta buenísimo Lic... me gustó un montón me gusta lo que escribe por que son cosas muy ciertas!!! hasta pronto...